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domingo, 23 de enero de 2011

CAPAZ




Se puede comprender sin mucha dificultad que, ante la presencia de un nuevo ser en la familia, sobre todo si es el primero, se ponga todo patas arriba. Empezando por el largo asedio que ha significado el embarazo, siguiendo por el importante trauma del parto y terminando porque hay una nueva persona que no sabemos ni como si llama porque hasta tenemos que ponerle nombre. Hay que reorganizarlo todo, espacio, tiempo, personas… Se trata sencillamente de una profunda revolución que, por una parte no significa más que el cumplimiento del ciclo de la vida, pero por otra que ya nada será igual y que todos quedaremos marcados por esa nueva presencia, del mismo modo que estaremos marcando con nuestro comportamiento a ese nuevo ser que nos ha legado.

Sin quitarle ni una pizca de dramatismo, también es importante saber que el ser que llega trae su pan bajo el brazo. No se trata de pan en sentido literal puesto que la comida hay que facilitársela, entre otras cosas, pero sí que tenemos que saber que no se trata de un ser tan desvalido como pudiera parecer. También es cierto que cada persona es un mundo y que cualquier cosa que se diga de manera genérica, tiene que estar cogida con alfileres porque ha de someterse en todo momento a las particularidades de cada uno. Pero creo que es bueno insistir en la idea de que cada persona que nace es un ser capaz: de dormir, de moverse, de chupar, de llorar, de tocar y de ser tocado, de oir, de ver a partir de los dos primeros meses, y sobre todo y lo más importante, de aprender.

Con facilidad podemos encontrar dificultades importantes para encajar al nuevo ser que ha llegado y podemos en muchas ocasiones sentirnos culpables de que no le estamos ofreciendo demasiadas condiciones para que se desenvuelva adecuadamente. Y es cierto que siempre podemos encontrar argumentos que nos manifiesten nuestras deficiencias, unas veces por inexperiencia y otras por limitaciones personales y encontremos demasiado pobre el conjunto de atenciones que ofrecemos al nuevo. Es importante que no olvidemos que el recien llegado no es un objeto, sino una persona y cada gesto, cada sensación que le llega, olor, sonido, luz, caricia, se clava en su cerebro y allí se procesa y se almacena y se combina con otras informaciones anteriores para producir aprendizajes desde el principio. Por eso son fundamentales los ritos o rutinas que se deben repetir habitualmente. La repetición hace que el nuevo ser vaya disponiendo de armas a las que atenerse y hasta de secuencias temporales que asumir y orden de las mismas. Es una especie de reloj de acontecimientos que hacen que se vaya orientando si nosotros procuramos mantener mas o menos fijas en el tiempo.
Ese conjunto de hábitos elementales, repetidos con orden en los primeros momentos producen en quien los recibe una estructura básica, suficiente para saber cuando hay que moverse, cuando hay que mamar, cuando hay que dormir, cuando llega la limpieza, cuándo las palabras. Y todo eso ya es educación con valor de futuro. Por tanto, por una parte tenemos que asumir la responsabilidad que nos ha llegado con el nuevo inquilino, pero al mismo tiempo relajarnos y saber que está viviendo desde el primer momento su propia vida.

12 comentarios:

  1. Si Antonio, es muy importante el tema de crear hábitos. Desde el primer momento, de todo aquéllo que ha de ser valioso en el fufuro.
    Aunque parezca prematuro, no lo es !

    Como siempre, muy interesante tu exposición.
    Un abrazo.

    Ahh, excelente elección de la música !

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  2. Hola Antonio:

    Desde el principio tienen que tener un orden, para que se habituen.

    Las comidas a su hora, el dormir a su tiempo,
    y dejarles tocar las cosas para que aprendan el tacto de ellas.
    Y si no queremos que nos rompan nada, pues a guardar las figuritas en un armario
    Esto si tapar los enchufes y guardar las ocsas peligrosas para que no esten a su alcance, como los medicamentos y detergentes.
    Y hay que dejarlos que se ensucien con la tierra y que jueguen mucho.

    Antonio, me ha parecido muy buena tu entrada.

    Besos, Montserrat

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  3. Antonio,en verdad cada vez que te leo me impresiona lo que sabes,como lo centas y la forma de hacerlo.Es precioso,justo y verdad todo lo que acabas de decir,pero creo que nade nos paramos a meditar sobre eso con el mogollon de cosas que trae un nuevo ser al mundo,hasta que tu,con dulzura,claridad y belleza nos dices lo qu és.Un ser maravilloso que desde el primer instante de su vida es capaz de respirar,mamar,oler y aprender a amar.Besos de luz amigo mio y gracias por tu escrito.

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  4. Es realmente sorprendente observar y adivinar lo que sienten ante los objetos,las caras,los colores y las letras.Si,es importante ofrecerles cariño y educarles.Sin embargo,como antes te decía,lo más bonito es empatizar con ellos y vivir de nuevo nuestra niñez,descubriendo el mundo poco a poco...Quizá, porque recuperamos la vida,que ya pasó y renovamos nuestro interior,donde aún vive ese "niño eterno"que nunca nos dejó.
    Mi gratitud por este precioso tema,que me hace recordar aquel tiempo con mis hijos pequeñitos.
    Mi abrazo grande siempre,amigo.
    M.Jésús

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  5. Mi primara hija me supueso muchos miedos porque pensaba que no lo estaba haciendo nada bien. Cuando llegó el segundo me relajé y tuvo una crianza mucho mejor que la niña. Disfruté muchísimo más, pero la inexperiencia fue lo que me marcó con la primera.
    Y desde luego hay que crear desde un principio hábitos y una situación armoniosa.

    Muy buen post, enhorabuena

    Un beso

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  6. Seguir tus razonamientos es un lujazo porque te mueves con lógica y orden dejando una exposición perfectamente argumentada y entendible.
    Esas criaturas que asoman a la vida son receptoras insaciables de todo lo que acontece a su alrededor y crearle los hábitos de comportamiento, es como despertar los actos reflejos que más tarde funcionarán como los pilares básicos de su comportamiento.
    En cuanto al "pan bajo el brazo", también es cierto que su presencia, aunque cambie nuestra existencia, nos aporta nuevas vivencias y un enriquecimiento incuestionable en sentimientos y actos.
    Como siempre, un placer y mi admiración con un beso.

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  7. Los referentes tanto espaciales como temporales son indispensables para la ordenación del los sentimientos en la vida del nuevo ser, si no todo sería dispersión y no sabría muy bien como ubicarse en la vida.

    Un abrazo.

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  8. Sí. El primer momento de su propia vida. A veces cuesta independizar ese concepto, y nos empeñamos en que sean nuestros continuadores, sucediéndonos o tomando el relevo de nuestras aspiraciones o necesitando paliar nuestras frustracioens.

    Muy interesante las reflexiones.

    Un beso, vecino

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  9. MIS PENSAMIENTOS. MERCÉ CARDONA. Dice, es la primera vez que visito tu casa, me ha gustado mucho tu escrito, desde luego tienes razón, cuando llega un ser tan pequeñito desde el primer día tiene que tener un orden, yo tengo dos, y el primero fue más dificil, pues todos querian tocarlo, mecerlo, tuve que cuadrarme para logralo.

    Besosssssssssssss

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  10. Siento este periodo de silencio pero ando muy ocupada por cuestiones laborales. Te leo cuando puedo y sigo aquí.
    Abrazos de mar atlántico.

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  11. Antonio, me ha encantado como cuanta naturalidad y sencillez nos recuerdas la inmensa responsabilidad que conlleva recibir a un nuevo humano en la familia y a la vez saber dejar actuar a la sabiduría y a la fuerza de la propia vida. Siempre me ha impresionado que las vivencias y aprendizajes de los 3 primeros años sean tan determinantes ¡y es justo lo que nuestra memoria consciente olvida!
    Un abrazo!
    pd: no sé pq no me deja utilizar mi perfil de siempre...

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  12. Una entrada llena de sabiduria, he disfrutado mucho leyendo tu exposición sobre la llegada de un ser que hasta hay que ponerle nombre...creo que voy a disfrutar mucho entrando en tu blog !!!! todo lo relacionado con los niños me interesa mucho especialmente el estimularles progresivamente en su afan de descubrir!!!!he pasado pro todas las aulas : bebes, chiquitines
    pequeños medianos y mayores 0 años a 5 cada etapa tenia su especial atención,he sido una enamorada de mi profesión. Tengo relación con algunas exalumnas por medio de la amistad con suspadres...me siento abuela de sus hijos!!!!
    hasta pronto. Un besazo de Begoña

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