Reconozco
que ser mayor y encontrarse fuera de los avatares cotidianos para ganarse el
pan, o sea jubilado, tiene muchos inconvenientes porque te encuentras como
fuera de juego. Te descuidas y se te pasa, por ejemplo, que hoy es domingo. O
valoras el domingo con la misma calidad que el lunes. Pero también tiene
algunas ventajas que no resultan desdeñables. No es pequeña la de vivir en un
país en el que existen las pensiones y los viejos podemos contar con un dinero
mensual para sobrevivir sin tener que depender de nuestros familiares más
cercanos, que bastante tienen ellos con buscarse la vida para sí mismos. Lo que
voy a decir lo he dicho casi siempre, por lo que me he visto envuelto en más de
un conflicto por decir lo que pensaba. Hoy me tomo la libertad de repetirlo,
tranquilo y desde fuera, y mi opinión no afecta más que a quien buenamente me
lea por su gusto y comparta lo que digo libremente.
Empieza
el curso y todo el mundo se echa la mano al bolsillo, con la preocupación de si
podrá o no disponer de fondos suficientes para cubrir los compromisos que lo
envuelven. Si yo digo, con toda tranquilidad, que lo que hace falta de verdad
son los alumnos, los maestros, las escuelas y poco más, sé que estoy diciendo
la verdad, como la decía muchos años atrás, a pesar de que suene lejos de
muchas realidades que agobian a las familias y que no son sustanciales en el
proceso educativo. Los uniformes, los libros de texto, las mochilas y tantos
materiales individuales como usan nuestros escolares sin que sean
imprescindibles los cargan físicamente de kilos, de obligaciones y de
compromisos económicos a sus familias, cuando son elementos prescindibles en
cualquier desarrollo curricular. Hemos vivido en muchas de nuestras escuelas
sin libros de texto individuales, con materiales de trabajo comprados en
cooperativas de familias para usar en común, con magníficas bibliotecas de aula
y de centro acumuladas de cursos anteriores y actualizadas por las familias y
hemos cubiertos los objetivos exigidos con solvencia y con alegría, conscientes
de que la Escuela era nuestra y estaba para servirnos.
Sé que
puede resultar como de otro mundo parte de lo que digo pero juro por los dioses
de la vida que es perfectamente real, que no es producto del Alzheimer, del que
estoy libre por estas 24 horas, porque lo he protagonizado yo y muchos otros
compañeros en escuelas rurales y
urbanas, públicas y concertadas. Nuestros resultados finales, no solo
alcanzaron las cotas oficiales exigidas sino que, perdonen la inmodestia, a
pesar de que tuvieron su polémica agregada con demasiada frecuencia, fueron
envidia de más de uno y más de dos que prefirieron mantenerse atados a
costumbres sin demasiado sentido y parapetados en esquemas de comportamiento
acomodaticio, sabedores de que las autoridades no iban a cuestionar sus
resultados siempre que respetaran los mínimos exigidos por las leyes en vigor
en cada momento. Y es que el cuerpo docente tiene valores indiscutibles como
planteamiento, pero como otros cuerpos masivos, adolece muchas veces de
acomodarse muchas veces en posiciones de mínimo esfuerzo aunque su actitud poco
ejemplarizante, signifique que la Escuela deje de estar al servicio de la
sociedad y se sirva de ella, caiga quien caiga, para mantener sus privilegios.
Ya tenía ganas de asumir mi vena reivindicativa y, en algún momento, soltar alguna verdad como un puño, por si los que puedan quedar de mi cuerda, que estoy seguro que quedan, aunque sean pocos como siempre, no se sientan tan solos. El silencio cobarde o culpable de unos y de otros duele demasiado con su acción o su omisión y, cuando uno tiene que sufrir sus efectos durante mucho tiempo, las consecuencias se atragantan y se hacen difíciles de digerir. Resumiendo: la Escuela no tiene por qué ser dinero, aunque alguno será necesario sin duda, sino trabajo y esfuerzo común de maestros y de familias para que esa institución que tiene que estar al servicio de la sociedad, cumpla con su competido para todos y en las mejores condiciones posibles.
Totalmente de acuerdo !!
ResponderEliminarSoy Aurora , Antonio, y estoy de acuerdo contigo 🤗
ResponderEliminarYa lo creo. Por supuesto.
ResponderEliminarComo bien dices, lo hemos vivido.
Y ya ves ...
No estás solo.
Gracias.
Feliz domingo.
Besos, amigo querido.
En cuanto a la jubilación, significa que seas dueño y responsable del todo de tu tiempo...
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo amigo, hay muchas experiencias en diferentes niveles educativos y diferentes partes del pais y funciona. Alguna interés habrá para que siga así
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