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domingo, 18 de noviembre de 2012

CIENCIA

Me resisto a ser esclavo, ni siquiera de mí mismo. El año pasado por estas fechas, quizá un poco antes, rompimos el ritmo a propósito de un viaje a Oslo, que nos sirvió para reflexiones sobre la realidad inmediata de esa ciudad. Hoy es la experiencia sobre la obra de Escher de mi compañero Manuel Ángel Puente, que en estos momentos trabaja con niños de 4 y 5 años en la Escuela Infantil Duende de Granada, aprovechando que en El Parque de las Ciencias de nuestra ciudad hay una exposición permanente sobre este autor europeo.
A final Escher no es más que una excusa para hacer lo que se quiere hacer con los niños que desde luego no es precisamente que aprendan que la eme con la a es ma, que también. Pero es que el mundo es muy grande y no siempre sabemos mirarlo con ojos de verlo ni con ojos de sentirnos protagonistas de él ni con ojos de ser capaces de acercarnos a una personalidad tan rompedora y tan potente como la de Maurits Cornelis Escher (1998 – 1972), conocido entre otras muchas cosas por sus grabados en madera, sus figuras imposibles y sus mundos imaginarios. Pues Manuel decide acercarse a Escher como en otra secuencia de otro curso decidió trabajar la muralla de la Alhambra, tan dentro del imaginario colectivo de Granada. Se muestran las obras de Escher y los niños se familiarizan con este artista reciente y polifacético y hablando hablando, sugieren la posibilidad de realizar una maqueta de la Escuela Duende inspirada en ideas parecidas desarrolladas por Escher y que están expuestas en El Parque de las Ciencias.
Pues ya tenemos trabajo para varios meses. Trabajo colectivo se entiende y simultaneado con las tareas cotidianas, pero trabajo que hay que planificar, organizar, distribuir y realizar. Toda la seriedad científica sobre materiales, distancias, proporciones exactamente parecidas a las que los ingenieros de cualquier obra han de realizar para encontrar la mejor estructura, los materiales más adecuados y el camino más idóneo para conseguir el resultado apetecido en las mejores condiciones. No hay ninguna diferencia cualitativa. Cuantitativas sí porque es evidente que no es lo mismo la capacidad y los conocimientos de un menor de 4 años que la de un ingeniero o arquitecto experimentado. Pero la curiosidad y las ganas sí que pueden ser las mismas y eso, aunque no lo parezca, resulta ser lo esencial para desarrollar la Ciencia, el Arte o cualquier obra humana que requiera de grandes dosis de creatividad, de disciplina y de trabajo en común.
Este trabajo que aquí se cuenta y se muestra fue realizado el cuso anterior pero como las grandes obras de cualquier orden, se guardan y forman parte del acerbo común de la humanidad. Pues aquí igual, la maqueta que se realizó de la Escuela Infantil Duende con tanto esfuerzo y entre todos no es un asunto baladí sino que tiene la grandeza de lo que debe guardarse y quedar para ser contemplada y asumida como parte del acerbo histórico común, como parte de la historia colectiva de la escuela. Pues el jueves pasado, día 15, se acordó que, además, se expusiera en el Parque de las Ciencias, junto a la obra de Escher que sirvió de inspiración y junto a otras experiencias realizadas por otra cantidad importante de centros educativos de Andalucía de distintos niveles. Me lo comentó Manuel, con quien tengo el gusto de intercambiar correos y comentarios en el blog y le prometí que me pasaría a compartir con él y su grupo de menores y familias el momento y le pedí permiso también para poder contarlo en este blog que quisiera ser testimonio personal y colectivo de una experiencia educativa muy amplia desarrollada en Granada durante muchos años y de la que tanto Manuel como el que esto escribe formamos parte.

11 comentarios:

  1. Un interesante planteamiento. Escher resulta difícil de clasificar. Se han hecho múltiples interpretaciones de sus obras, pero la realidad es que Escher básicamente dibujaba (en b/n) lo que le gustaba. No basaba su trabajo en los sentimientos, como otros artistas, sino simplemente en situaciones, soluciones a problemas, juegos visuales y guiños al espectador. Cuando compré la primera lámina, copia de uno de sus dibujos, me quedé enganchado...

    Un cordial saludo
    Mark de Zabaleta

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  2. http://youtu.be/5Mo0auaGKNA
    Hace pocas semanas un artista local aportó al centro ADISPAZ este y otros videos acerca de las linoleografías y otras realizaciones de Escher. Los chicos se quedaron boquiabiertos, tal cual.
    Lo cierto es que entrar en los universos infinitos de Escher es adquirir otras dimensiones del arte. Una maravilla total.
    Bs

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  3. Bueno, Antonio, nunca había oído hablar de Escher, así que he tenido que irme a la wikipedia y luego a mirar imágenes para tener una ligera idea.
    Lo que me ha interesado también es cuando hablas de la clase de los de cuatro años haciendo un trabajo manual entre todos. No sé si será como en la guarde, pero te confieso que allí casi cada semana había algún trabajo manual especial -día del padre, de los enamorados, de la madre, Halloween, día de la paz, cruces, patios...- y los peques, como mucho, a lo mejor ponían el dedito lleno de pintura, guiado por nosotras, aquí y allí. El resto del trabajo nos lo dábamos nosotras, bueno, te contaría hasta que a veces me encontraba que las seños estaban tan interesadas con el trabajo manual que los niños estaban a su p. bola... demasiado a su bola, vamos, que me parecía indignante, y todo para agobiar a los padres con un montón de "trabajos manuales" que sus niños no habían hecho y que a nosotras nos estresaba. Bueno, a mí, no, me divertía hacerlos pero me parecía que hubiera sido mejor que los peques hicieran más, aunque quedara peor, y si no, pues otra cosa.
    Ya me enrollé como una persiana, y eso que es lunes.
    Un besito.

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  4. Gracias Antonio; es emocionante leer lo que reflejas en tu blog sobre nuestro trabajo.
    Como la vida sigue, ahora estamos centrados en las propias casas de los niños.

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    1. Te pido, por favor, que no me prives de lo que vayais haciendo. Soy consciente de qaue mi trabajo de cada día ha terminado, pero ya sabes que sigo sintiéndome vivo y, en alguna medida, deseoso de ser partícipe de ese proyecto con el que me moriré entre las manos sin que ninguna de nuestras moserias, que sabes que las hay, logre arrebatármelo. Un abrazo y gracias a tí

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    2. En este curso, con los mismos niños con los que el curso pasado trabajé la obra de Escher y la maqueta de Duende, he estado trabajando la Alhambra combinada con Sorolla. Ha sido un trabajo en el que ha habido arte, más maquetas, poesía, dos visitas a la Alhambra y muchas ganas de aprender. De los palacios de los reyes y las alcazabas de los soldados pasamos a las casas de la gente, y ¿qué mejores casas que las suyas propias? En ello estamos, pero como tenemos dos madres arquitectas, el proyecto está creciendo y ya tenemos implicados en él a alumnos de arquitectura. Ya te contaré.

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    3. Pues quisiera, si es posible, algún testimonio fotográfico para poder elaborar, con tu permiso por supuesto, algún otro comentarios, que me apetece. Ya sabes que yo no hacía las cosas así porque debo ser mas intuitivo o no sé. Pero me encanta que podamos ser distintos. Creo que es riqueza la diferencia. Y, por supuesto el proyecto en marcha también me interesa, siempre, insisto, que tú lo veas bien. Un abrazo

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    4. Cuando tenga acabado el dossier de la Alhambra te lo paso, para ver si quieres comentar algo.

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  5. Querido Antonio !

    Hermosa manera de romper la rutina y de dejar de ser esclavo de uno mismo ( como bien dices ) ademas los niños se enriquecen y Escher es
    infinito como bien dice Pilar.
    Tambièn me he quedado enamorada de la bella musica que has puesto, nunca te comento nada de ella pero hoy si he querido hacerlo :)

    Un fuerte, fuerte abrazo y un beso

    Aurora

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  6. Bunas noches Antonio.
    Al fin tengo un ratito para disfrutar de los blogs.
    Una estupenda experiencia, compartir con estos hombres y mujeres del mañana además de estimular su cratividad contemplando esta Exposición en el Parque de las ciencias.
    Encantada de leerte.
    Feliz domingo.
    Un abrazo, Montserrat

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  7. Siento sinceramente haberme premiado con la compañía de un blog como el tuyo, Antonio.
    Que tengas una linda semana. Abrazos.

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